El turismo no solo aporta beneficio en el ámbito económico como de costumbre se hace ver, sino que conlleva también un impacto sociocultural que en líneas generales suele ser analizado desde un punto de vista negativo. Y es que el turismo cuenta con la capacidad de aportar beneficios positivos cuando fomenta el contacto entre diversas comunidades.
Impacto sociocultural positivo
La calidad de la experiencia turística siempre va a depender de las atracciones que sean ofrecidas principalmente en el destino, pero también de la infraestructura y de la facilidad disponible. Normalmente, el turismo trae consigo una gran mejora de la atención sanitaria dentro de la región donde se desarrolla, pues los turistas tienden a darle prioridad a todos los aspectos que se relacionan con la salud. Ésta es una mejora que suele extenderse a otros beneficios y servicios como por ejemplo: el alumbrado, la recogida de los desechos, una notable mejora de las comunicaciones, nuevas sucursales de entidades financieras, entre muchas más. De este modo, la calidad de vida de los residentes se incrementa.
El turismo también puede ayudar con el estímulo del interés de sus residentes por su cultura propia, por sus tradiciones, costumbres y patrimonio histórico, ya que los elementos culturales que contienen valor para los turistas son recuperados y conservados, de manera que puedan ser incluidos en la experiencia turística. Este se trata de un despertar cultural con el que se puede constituir una experiencia positiva para los residentes, a quienes se les aporta cierta concienciación sobre la continuidad histórica y cultural de su comunidad, y de la misma manera pueden convertirse en aspectos que potencien dentro del atractivo turístico del destino. Visto de esta manera, el turismo puede contribuir a:
- La preservación y rehabilitación de monumentos, edificios, lugares históricos.
- La revitalización de las costumbres locales: artesanía, folklore, festivales, gastronomía, etc.
- Puede convertirse en un factor que acelera los cambios sociales positivos dentro de una comunidad, en términos de mayor tolerancia y bienestar.
El efecto de la demostración pasa a ser beneficioso cuando estimula a los residentes a luchar y/o trabajar por esas cosas que carecen, incrementando su nivel de calidad de vida o valor de igualdad.un ejemplo de ello se encuentra en el empleo que proporciona la actividad turística en el sector, situación que ha permitido mayor movilidad en la escala social de comunidades muy jerarquizadas.
Impacto sociocultural negativo
En diversos países que se encuentran en vías de desarrollo, se ha notado cierto resentimiento con respecto al turismo internacional, dicha actitud se hace más evidente en la medida en la que son mayores las diferencias económicas entre los visitantes y los residentes. Para muchos de estos países, el turismo ha establecido las bases de una nueva forma de colonialismo que esta basado en la dependencia de las divisas extranjeras como una vía para su desarrollo económico. En consecuencia, en algunos destinos es evidente el incremento del crimen, la prostitución, el juego, el terrorismo y los conflictos generados por las drogas. En oportunidades, los turistas se consideran como elementos mediante los cuales es posible hacer negocio y obtener publicidad (por ejemplo, en el caso del terrorismo).
El turismo también es capaz de fomentar la desculturización del destino y su efecto podría llevar a la desaparición de la cultura de la comunidad receptora. Dicho fenómeno puede afectar a muchos países en desarrollo, pues la cultura de los turistas suele ser percibida como superior a la local, sobre todo por el mayor nivel de vida que manifiestan, lo que provoca la adaptación por ejemplo, de costumbres occidentales a culturas indígenas. Finalmente, otro aspecto a considerar es la mercantilización extrema de las tradiciones locales, situación que las despoja de su verdadero significado, fomentando un proceso de desculturización, que a la vez podría terminar destruyendo los atractivos que en su día iniciaron el flujo de visitantes.